Un futuro en llamas
La junta general del Consorcio de Bomberos afronta esta semana la cita más trascendental de su historia, en la que pondrá fin a una gestión que le ha llevado a la ruina
Día 16/10/2012
El futuro del Consorcio Provincial de Bomberos
se decide esta semana. Y no, no es una frase hecha. Los 73 municipios
cordobeses que forman parte de este organismo (todos excepto Córdoba y
Almodóvar del Río) tendrán que votar en la junta general que se
convocará el viernes, como muy tarde, si quieren seguir formando parte
del Consorcio que conocen hasta ahora u optan por el nuevo modelo de
gestión que planteará el equipo de gobierno del PP en la Diputación,
socio mayoritario con el 51 por ciento de representación. Esta última
alternativa es la única posible, ya que la salida del Consorcio es algo
inviable, ya que ello implicaría saldar los atrasos pendientes, la parte
proporcional de los 13 millones de deuda entre impagos a la Seguridad
Social y la Agencia Tributaria y crear un servicio propio de la noche al
día, ya que esta prestación es una obligación que tienen todos los
municipios y no puede haber un vacío. Además, si el 70 por ciento de las
corporaciones locales no tiene liquidez para pagar en tiempo y forma su
aportación al Consorcio, difícilmente podrán asumir la inversión que
supone crear un parque de bomberos propio.
Así que aceptar el nuevo modelo es la única
opción. Y esto sólo implica una cosa: Poner más dinero. ¿Pero cuál es el
modelo que presentará Diputación? Según ha podido saber ABC se va a
plantear una gestión más eficaz de los recursos y se va a «meter en
vereda» a los ayuntamientos para que se pongan al día en sus
obligaciones. Y sobre todo, se va a dotar de transparencia y mayor
control a la gestión. Para ello, se acabará con la figura «todopoderosa»
del gerente, que hasta ahora ha sido quien ha dirigido el Consorcio
como si de su empresa se tratase. De hecho el anterior responsable de la
Gerencia, Antonio Navarrete, está bajo sospecha por haber desviado
fondos por valor de 546.021 a cuentas privadas, entre ellas la suya. El
fiscal también investiga otros hechos presuntamente delictivos, como la
usurpación de firma de funcionario público por parte de Navarrete para
pedir un crédito de 2,7 millones o el cobro de 127.860 euros en concepto
de horas extras cuando no tenía derecho a ellas por ser un cargo
directivo.
Pues bien, para evitar que estas prácticas, en
cuarentena para ser consideradas fraudulentas, se repitan, el presidente
del Consorcio de Bomberos, Manuel Gutiérrez, presentará a la junta
general para su votación la creación de las figuras del tesorero y del
interventor, que se unirán a la plantilla del organismo.
Presupuesto real
El otro pilar del nuevo modelo de gestión del
PP será el plan económico-financiero, que en palabras del vicepresidente
primero de la Diputación, Salvador Fuentes, será el «andamio del nuevo
Consorcio». Con este documento se prentede hacer un diagnóstico de la
situación financiera del organismo, que contemple y asuma la deuda de
8,2 millones a la Seguridad Social, para lo cual ya hay un plan de pago;
la reclamada de oficio la semana pasada por la Agencia Tributaria de
3,8 millones por impagos de cuotas del IRPF de los ejercicios de 2009 y
2010 -incluye las sanciones y los intereses de demora-, la deuda de 1,4
millones por el impago del IRPF de 2011, en periodo voluntario de cobro y
sin sanciones aún; o la subida de cuotas previstas para mantener el
nuevo Consorcio, ya que hasta ahora el 90% del presupuesto era para
pagar a la plantilla, sin margen para modernizar las instalaciones o
renovar los vehículos y material de los bomberos.
Otro aspecto de la nueva gestión será acabar
con «los presupuestos fotocopiados». Es decir, durante años, el
presupuesto del Consorcio era una copia. Así lo denunció y lo demostró
el actual gerente, Juan Carlos Jurado, quien desveló que ni si quiera se
actualizaba el precio de la gasolina, presupuestando a 0,81 céntimos el
litro todos los años.
Y por último, y quizá la medida más dolorosa
del nuevo modelo de Consorcio Provincial de Bomberos, es el pago
anticipado de cuotas para evitar los descubiertos, como el que sufre
ahora el organismo, sin dinero para pagar las nóminas y que está
obligado a recurrir a una operación de crédito para garantizar los
salarios de los bomberos hasta 2013. Esta situación se debe al
incumplimiento de los ayuntamientos de hacer su aportación en tiempo y
forma, ya que la gestión del PSOE, la única que ha conocido hasta el año
pasado el Consorcio, mal acostumbró a los municipios a no pagar y
esperar a que Diputación le retrayese la cuota con cargo a su
participación en los ingresos generados por los tributos. Y esto se ha
ido manteniendo en el tiempo y obligando a pedir hasta dos créditos al
año para pagar nóminas, lo que engorda la deuda con los bancos.
El equipo de gobierno del PP es consciente de
la delicada situación financiera de los ayuntamientos, pero ya se ha
hartado de parchear y marear la perdiz para no afrontar la cruda
realidad. En la próxima junta general contará las verdades del barquero.
Y para ello, tendrá un aliado inesperado y hasta cierto punto
antinatura -según la ideología de izquierdas-, como es el sindicato
mayoritario CSI-F, que ha pedido tener voz en la junta para «dar un
tirón» a los ayuntamientos y que asuman sus responsabilidades para
enmendar el desaguisado dejado por los anteriores gestores.
http://www.abc.es/20121016/cordoba/sevp-futuro-llamas-20121016.html